lunes, 19 de julio de 2010

León Gieco. El imbécil

2 comentarios:

  1. Qué dificil es tratar este tema porque el responsable de esto es todo un sistema que funciona mal. Tratando de ser imparcial, no podemos juzgar al niño que sale a trabajar porque no tiene un padre que lo ayude a estudiar ni lo eduque en un hogar. Detrás de estos niños hay padres que les exigen dinero al final del día si no los golpean, los explotan y de ese dinero ellos ni comen. Hay otros niños que usan ese dinero para drogarse y no pensar en todo lo que les falta: amor, familia, educación, comida, una vida digna. Pero, también hay niños que trabajan limpiando vidrios, cuidando autos, para poder comer y llevarle algo de comida a sus hermanitos más chicos que tampoco tienen la culpa de su suerte. La realidad es que cuando nos encontramos con estos niños no sabemos, muchas veces, cómo actuar porque desconocemos que pueden hacer ellos ya que pueden actuar bajo presión o adicción... Cuando uno va sola por la calle va sin miedo pero con cuidado, pero cuando vamos con nuestros niños pequeños muchas veces abrimos más los ojos...es así.

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  2. Estoy de acuerdo, Marcela. El sistema hace que los hermanos no sean unidos, como quería Hernandez. En lugar de hermanos nos sentimos en distintos bandos y nos tenemos miedo o rencor.

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